En el divorcio de mutuo acuerdo, ambos cónyuges comparecen ante un Juez de primera instancia y presentan una demanda conjunta solicitando el divorcio. Esta demanda debe ir acompañada de varios documentos, incluyendo los acuerdos a los que ha llegado la pareja. En este tipo de divorcio, los cónyuges son representados por el mismo abogado y procurador.

Una de las ventajas de este proceso es que los cónyuges pueden decidir juntos asuntos como la asignación de la vivienda familiar, la pensión compensatoria y su renuncia, el régimen de visitas y comunicaciones, entre otros, llegando así a una solución satisfactoria para ambas partes.

 

El proceso se desarrolla en varias fases:

1. Presentación de la demanda:

Los cónyuges presentan la demanda de divorcio, a través de su abogado,  de forma conjunta o, en caso de acuerdo, uno de ellos puede presentarla con el consentimiento del otro. Además, se adjunta una propuesta de convenio regulador y otros documentos requeridos por la ley.

El Juzgado competente para este tipo de procedimientos es el del último domicilio conyugal o el del domicilio de cualquiera de los cónyuges, a elección de los demandantes. Por lo general, los Juzgados solicitan pruebas de su competencia territorial, por lo que se adjunta un Certificado de Empadronamiento donde conste el matrimonio o uno de los cónyuges.

Si algún hecho relevante no puede ser probado mediante documentos, se propondrá en la misma demanda la prueba que los cónyuges utilizarán para respaldarlo.

 

2. Audiencia de los cónyuges y ratificación de la demanda:

Una vez presentada la demanda de divorcio, se cita a los cónyuges, dentro de los tres días siguientes, para que ratifiquen individualmente su petición de divorcio. Si uno de los cónyuges no ratifica su deseo de divorciarse, ya sea porque ya no desea divorciarse o porque no desea hacerlo de manera amistosa, se archiva el caso y el divorcio amistoso se da por terminado. En ese caso, el otro cónyuge puede solicitar el divorcio, pero ya se convertiría en un proceso contencioso debido a la falta de acuerdo entre ambas partes. Si los dos cónyuges ratifican la demanda de divorcio pero falta algún documento obligatorio, el Juez otorga a las partes un plazo de 10 días para completarlo.

Durante ese mismo plazo, se llevarán a cabo las pruebas propuestas por los cónyuges y las que el Juez considere necesarias para decidir si se debe aprobar el convenio regulador y para demostrar las circunstancias requeridas por el Código Civil en cada caso. Sin embargo, no siempre se realizarán pruebas en todos los casos.

 

3. Informe del Ministerio Fiscal:

El Ministerio Fiscal redactará un informe sobre lo establecido en el convenio regulador en relación a los hijos.

 

4. Sentencia de divorcio:

Una vez cumplidos los trámites anteriores el Juez dictará sentencia decretando el divorcio y se pronunciará sobre el convenio regulador. Lo normal es que el Juez dicte sentencia una vez que los dos cónyuges hayan ratificado la demanda de divorcio.

Si una vez concedido el divorcio, el Juez no aprueba el convenio regulador las partes redactarán un nuevo convenio regulador en un período de 10 días; si el Juez hubiera rechazado el convenio sólo en algunos puntos, las partes deberán modificar el convenio regulador presentado sólo en aquellos puntos en que el Juez no esté de acuerdo.

Una vez presentada la nueva propuesta o habiendo transcurrido los 10 días sin presentarla, el Juez dictará auto dentro de los tres días siguientes resolviendo lo procedente. Asimismo, la sentencia será inscrita de oficio por el Juez en el Registro civil junto a la inscripción de matrimonio y sólo tendrá efectos con respecto a terceros de buena fe una vez que haya sido inscrita.

 

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